El mantenimiento regular permite la detección temprana de posibles problemas, como infecciones, inflamación de las encías o aflojamiento del implante. Abordar estos problemas de manera oportuna puede prevenir complicaciones más graves.
El mantenimiento regular de los implantes dentales es esencial para preservar la salud bucal, prevenir problemas a largo plazo y garantizar la durabilidad de la restauración. Un programa de cuidado personalizado, que incluya visitas regulares al dentista y una buena higiene oral en casa, es clave para el éxito a largo plazo de los implantes.